La imagen del presidente hondureño Juan Orlando Hernández dejando su domicilio con chaleco antibalas y esposado de pies y manos para ser extraditado a los Estados Unidos, no es noble y honorable si lo llevamos a la política. Pero la acusación que lo vincula con el narcotráfico, casos de corrupción y tráfico de armas, es un fenómeno que cada vez preocupa más por su frecuencia.
Sus vínculos con la organización criminal Cartel de Sinaloa, dan cuenta de la magnitud y el poder del narco que se extiende en diversas fronteras.
Su hermano Juan Antonio Hernández o "Tony Hernández”, ex miembro del Congreso Nacional de Honduras, fue acusado y sentenciado a cadena perpetua en la Corte de Distrito Sur en Nueva York, por recibir millonarios sobornos de la poderosa organización mexicana y otra hondureña conocida como los Cachiros, entre otras.
En México, la situación no es mejor ya que en noviembre de 2018, Jesús “El Rey” Zambada, ex jefe de operaciones del Cártel de Sinaloa, testificó bajo juramento que, a comienzos de la década del 2000, durante el Gobierno de Vicente Fox, gastó personalmente 300,000 dólares (USD) al mes sobornando a militares y funcionarios de México, para que en enero de 2001, Joaquín “El Chapo” Guzmán, escapara del penal de Puente Grande, en Jalisco.
Desde ese entonces no solo a Fox se le vincula de complicidad para permitir una fuga, ya que el abogado que llevó la defensa del Chapo en Nueva York, Jeffrey Lichtman, indicó también que Enrique Peña Nieto y su antecesor en la presidencia de México, Felipe Calderón, también habrían recibido sobornos millonarios por del narcotráfico.
Una peligrosa narco-política, en donde el soborno y sobre todo la muerte, son la mano negra que oculta como la coca, han permitido al Cartel de Sinaloa operar, recibir protección y hasta de acabar con sus enemigos, e incluso en Colombia, con Pablo Escobar, financiar una campaña política para ser electo Senador y blanquear la imagen del más vil de los narcos en el planeta.
Ese, es el poder de la droga.
Imágenes de Getty Images, Reuters, BBC e Infobae
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