Como cada 7 de abril, El Día Mundial de la Salud se celebra para conmemorar el aniversario de la fundación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1948 y elige un tema que destaca un área de interés prioritario para la organización.
Este año la OMS aboga por la salud del planeta que se ve afectada por una triple crisis interconectada por el cambio climático a través de la pérdida de biodiversidad y la contaminación, que afecta directamente la salud de las personas y para lo que se requiere una acción transformadora en los sectores de energía, transporte, naturaleza, sistemas alimentarios y finanzas.
Se necesitan cambios que, en medio de una pandemia, con un planeta contaminado y una incidencia creciente de enfermedades, sean coincidentes con el lema de este año que es "Nuestro planeta, nuestra salud", y así llamar realmente la atención sobre la interconexión que existe entre los ecosistemas del planeta y nuestra salud.
En este sentido, la OMS calcula que cada año se producen más de 13 millones de defunciones debidas a causas ambientales evitables y, sin ir más lejos, a la crisis climática, que es la mayor amenaza para la salud a la que se enfrenta la humanidad.
Los fenómenos meteorológicos extremos como la escasez de agua, que está desplazando a las personas; la contaminación y los plásticos que llegan hasta el fondo de nuestros océanos o; los sistemas de fabricación de alimentos y bebidas poco saludables que impulsan la creciente ola de obesidad, son la causa principal de esta consigna que busca generar acciones transformadoras en cada una de estas problemáticas.
Un claro ejemplo en Latinoamérica se aprecia en cinco países de América Latina, donde un 30% de la población utiliza combustibles sólidos domésticos (Guatemala, Haití, Honduras, Nicaragua y Paraguay) y en 15 de los 35 países donde el 10% o más de la población todavía usa combustibles contaminantes para cocinar.
Una problemática en donde el planteamiento actual de la economía que conduce a una distribución no equitativa riqueza y el poder, se ve cuestionada por nuevas formas de economías del bienestar, que velan por la equidad y la sostenibilidad medioambiental.
Objetivos enfocados a la protección social para romper con los actuales ciclos de destrucción del planeta y de la salud humana, y en donde es necesario adoptar nuevas y eficaces medidas legislativas, que reformen el cómo se desarrollan las empresas con el medio ambiente y que incentiven a las personas a tomen decisiones saludables.
Un necesario llamado de atención ante la crítica situación sanitaria y medio ambiental que vive nuestro planeta.
Imágenes de Getty Images y Organización Panamericana de la Salud.
Bình luận